En el velorio de Adilene de 13 años y de Alexis de 16, Vicenta Bahena pide castigo a los asesinos, y dice que su esposo, que es testigo del crimen, no los vio porque iban con la cara tapada. Acuden cuatro miembros de la familia Le Barón y ofrecen apoyo legal para buscar justicia.
Por Alejandro Guerrero
Tomás Gómez, Cocula, Guerrero, 12 de febrero (El Sur).- En el velorio de Adilene, de 13 años y de su hermano Alexis de 16, asesinados a balazos la tarde del domingo, integrantes de la familia LeBarón refrendaron su ofrecimiento de dar apoyo total en materia legal para buscar justicia y el esclarecimiento del crimen, y criticaron la ausencia de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV).
Mientras que Vicenta Bahena Aguilar manifestó ayer en el velorio de sus hijos que le gustaría que cayeran los responsables y que caiga sobre ellos todo el peso de la ley, “para que no sigan haciendo más daño y provocando dolor a más familias, porque ahorita soy yo, y mañana pueden ser otras personas muriendo injustamente”.
Cerca de las 10:30 de la mañana, luego de visitar el basurero municipal de Cocula, Julián, Bryan y Adrián LeBarón y la esposa de este último, Shalom Tucker y el representante de la organización Siempre Vivos de Chilapa, José Díaz Navarro, se presentaron en el velorio de los dos adolescentes realizado en la comunidad de Tomás Gómez.
Llegaron con un arreglo floral, y en un emotivo encuentro, uno a uno abrazó a Vicenta Bahena y a Pedro Franco Macías, padres de los menores asesinados con quienes lloraron y les dieron sus condolencias, así como su respaldo y solidaridad.
Ante familiares de los dos menores asesinados la tarde del domingo, los hermanos LeBarón ofrecieron nunca abandonar a la familia en la vía legal para demandar justicia y el esclarecimiento de los hechos.
En declaraciones, Adrián LeBarón reclamó la ausencia de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV) y la Fiscalía General del Estado (FGE), y cuestionó quién está apoyando a la familia con asesoría jurídica.
Manifestó su compromiso de meterse más de lleno para apoyar a la familia. Cuestionó qué más ha hecho el Ministerio Público en relación con las investigaciones y dijo que hay muchos que deberían estar declarando sobre los hechos, “cuando haces una denuncia, empiezas a mencionar nombres que tuvieron que ver con los hechos o personas que vieron, donde estuvieron y seguir todo el proceso”.
Ofreció nunca abandonar a la familia por el lado legal y en el dolor y luto, “ahorita es el momento de acompañarlos”.
Dijo que es necesario el acompañamiento de la CEAV con las familias al momento de que presenten su declaración de los hechos ante el Ministerio Público y señaló que ahí es donde necesitan estar verdaderamente los responsables de atención a las víctimas.
Denunció que en este caso de Tomás Gómez no hay la presencia de la CEAV, ni apoyo de las fiscalías, “si no están en este preciso instante los responsables de atención a víctimas, entonces es parte de las fallas”.
Durante su visita a la comunidad, el dispositivo de seguridad de unos 30 efectivos de la Policía Federal se extendió en el perímetro de la vivienda y hasta la carretera Iguala-Cocula.
PIDE LA MADRE LA DETENCIÓN DE LOS RESPONSABLES Y TODO EL PESO DE LA LEY
Vicenta, madre Adeline y Alexis, manifestó ayer en el velorio que le gustaría que cayeran los responsables y que cayera sobre ellos todo el peso de la ley. “Yo sé que ni porque los tengan ahí (detenidos) me van a devolver a mis hijos, pero que ya no sigan haciendo más daño y provocándole este dolor a más familias, porque ahorita soy yo y mañana pueden ser otras personas muriendo injustamente, porque mis hijos murieron injustamente y es lo que yo quero, que ya no haya más muertes injustas”.
Hasta la tarde de ayer informó que no había tenido comunicación con representantes de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV) ni del Gobernador Héctor Astudillo Flores, y que sólo había recibido el apoyo para los gastos funerarios por parte de la Fiscalía del Estado y para el lote del panteón por parte del alcalde de Cocula, Carlos Alberto Duarte Bahena, emanado de Nueva Alianza.
Dio a conocer que el lunes por la tarde se presentaron a su casa agentes de la FGE para intentar entrevistar a su esposo, sin embargo, como se siente mal no ha presentado su declaración sobre los hechos.
A pregunta de la información que dio a conocer la noche del lunes la FGE que los ocho detenidos en Iguala, entre ellos una mujer y un menor de edad, luego del asesinato de un muchacho en la colonia Centro de Iguala, tendrían relación con el asesinato de los dos menores, Vicenta confirmó que le informaron la tarde del lunes de la Fiscalía que habían detenido a unos presuntos responsables del asesinato.
Dijo que como los pistoleros que interceptaron a su esposo y dieron muerte a sus hijos iban encapuchados, no los pueden identificar, “nosotros cómo vamos a decir que ellos son o no son, si venían tapados (de la cara) y prácticamente no vimos nada, eso ya les toca al Ministerio Público o a la justicia que se encargue de investigar los tiros, las armas, las huellas o qué sé yo”.
Contó que el agente que la visitó en su casa y que le informó de los detenidos, ofreció investigar bien a fondo y confió en que caigan los responsables del doble asesinato.
Al preguntarle si creen que esos detenidos tengan relación con el asesinato de sus hijos, insistió en que no vieron nada ni conocen a los agresores, y agregó que su esposo que iba manejando el carro cuando fueron interceptados por los agresores no los vio porque venían tapados de la cara y le dijo que si los ve, no los podría reconocer.
Contó que a su esposo lo pusieron contra el carro, hacia el volante, “y les dispararon a mis hijos de forma directa como cuatro ocasiones a cada uno y eso fue todo”.
Mencionó que por la diabetes y problemas de la presión arterial, Pedro, su esposo, ha estado perdiendo la vista, problema que dijo, además de que los agresores iban encapuchados no logró verlos. Le dijo que eran dos agresores que iban en una motocicleta, “no sé quién ni por qué, no sabemos nada”.
Señaló que son una familia muy pobre que no tienen dinero para moverse ni para presentar una denuncia por el doble homicidio, “lo que trabajamos apenas nos alcanza para pasar el día, si ganamos 50 pesos ya es mucho”. Dijo que ella al igual que sus hijos asesinados se dedica a la venta de productos a la orilla de la carretera que comunica a Iguala con Cocula.
Vicenta contó que ellos llevan viviendo en Tomás Gómez, Cocula, unos cinco años y de ahí es originario su esposo Pedro. Ella es originaria de la comunidad de Coronilla, municipio de San Miguel Totolapan, de donde salió hace unos cinco años luego de separarse de su primer esposo con quien procreó sus tres primeros hijos, entre ellos Adilene y Alexis, así como otra niña de 8 años.
Pedro, que era padrastro de los dos niños asesinados es padre sólo del hijo menor de Vicenta, de tres años de edad. Dijo que salió de su pueblo porque ya no se entendía con su esposo y en su comunidad no había trabajo.
Dijo que como padrastro de sus hijos mayores Pedro “fue un buen papá, se ganó a mis hijos, les dio el respeto y ellos se ganaron el cariño de él, y él se ganó el cariño de ellos, los respetaban como papá”.
MINUTO DE SILENCIO
Después de la una de la tarde llegó el sacerdote Felipe Vélez Jiménez, párroco de la iglesia de San Gerardo María Mayela de Iguala, quien ofició una misa de cuerpo presente.
Antes de su partida, Bryan, Julián, Adrián y Shalom acompañaron a Vicenta junto a los ataúdes de sus dos hijos mayores y pidieron guardar un minuto de silencio en memoria a ellos.
Los cuerpos fueron sepultados a las 4:00 de la tarde en el panteón de la misma comunidad.
